道 Michi, el camino

Hay una frase que dice: “si caminas solo llegarás más rápido. Si caminas acompañado llegarás más lejos.” Caminar acompañado, es importante en muchas ocasiones. Somos seres sociales, necesitamos de nuestros congéneres… Pero claro… Hay ocasiones, en que caminar acompañado te hace no llegar a dar un paso… Si la compañía no camina.

En determinadas circunstancias, hay que asumir que el camino se recorre solo, afrontar la soledad, confrontar las circunstancias e intentar asimilar que no hay nadie al lado, solo tú, solo dependes de ti.

Cuando lleves un largo viaje, tus pies estarán endurecidos por el camino, tu piel tostada por el sol, tu sudor salará la tierra del suelo, tus piernas sentirán esa ligera debilidad del que lleva horas de pie… En cambio, tu compañía, mantendrá sus pues suaves, el sol no habrá dañado su piel y su ropa no tendrá marcas de sudor por el esfuerzo…

Así, se hace evidente que la forma más sutil de DECIR, se ejerce sin abrir la boca. Con tus pasos. No se conoce Paris por haber estado en el aeropuerto unas horas…

Tanto en las relaciones sociales, como sentimentales, como en la vida profesional… En general, a veces es mejor decir “hasta luego” a tiempo y emprender una parte del camino solo.

Y entonces, surgirán nuevas compañías en el camino, que caminen por si solos y con los que puedas coordinar tus pies… ¡Entonces es el momento de caminar acompañado!